Home
Home

Autor: Lic. Ivana Rosales de Barbero

Otras paginas:
   Siguiente
   Índice conferencias

En esta página
   Introducción
   Objetivo
   Metodología

Mas información
   Parte 1 - Reglas
   Drogas frescas
   -Regla 2
   -Regla 3
   Drogas secas
   -Regla 4
   Parte 2 - Farmacopeas
   -Schwabe
   -Alemana
   -Americana
   -Brasil-Francia
   Conclusiones
   Bibliografía


Asociación Cordobesa de Farmacéuticos Homeopáticos
Entidad sin fines de lucro - Non-profit organization


Criterios para calcular la fuerza medicamentos

Top  Introducción

Aunque nunca podamos determinar con exactitud la acción terapéutica de nuestros medicamentos, sabemos, por la experiencia práctica de su aplicación, que provocan cambios sobre los seres vivos en sus hilos más sutiles, en el nivel de la energía vital.

Bien sabemos que la mayoría de nuestros medicamentos escapan a los controles químicos y se puede decir que ya no poseen moléculas de la sustancia original, sino sólo del excipiente, alcohol- agua. Por lo tanto somos conscientes de que no preparamos diluciones, sino estados o niveles de energía, a los que llamamos dinamizaciones.

Para preparar cualquier dinamización, tomamos una parte del nivel de energía o dinamización anterior y cuando preparamos nuestra primera dinamización debemos tomar una parte del estado energético madre o básico, entonces: no sería la energía el parámetro para calcular la FM (Fuerza Medicamentosa) de nuestras preparaciones madres?

Porque, en un medicamento vegetal, por ejemplo, ¿qué es lo que queremos capturar cuando preparamos su TM? Sus principios químicos? Unas cuantas moléculas producidas como consecuencia de su metabolismo?... Presentimos que hay algo más, algo escencial, que motiva no sólo la formación de los principios activos, sino todas las demás características que constituyen al vegetal y que lo hacen diferente de las otras especies. Esta escencia es energía.

Pero cómo podemos medir esa energía potencial que luego de la dilución y sucución despierta una verdadera energía medicamentosa, capaz de alterar el estado de equilibrio, salud o enfermedad, en el que se encuentra un ser? La respuesta podría estar en el campo más fino de la física y la encontraremos, quizás, con el tiempo.

Sin embargo, aún sin respuestas exactas, debemos elaborar nuestros medicamentos y tratar de que nuestras primeras diluciones sean homogéneas, para lo cual nos regimos por los únicos parámetros que por ahora podemos medir: el peso o volumen de las sustancias químicas o de las drogas usadas como punto de partida.

Pero el hecho de que los farmacéuticos hayamos simplificado las cosas no tuvo como consecuencia la uniformidad en nuestras preparaciones básicas respecto a estos parámetros.

El término FM esta íntimamente ligado al de concentración. Entonces, si hablamos de una sustancia química definida, no nos encontramos con mayores inconvenientes; la concentración es la relación entre el soluto y solvente, o solución. El soluto es la sustancia química, el solvente es agua, alcohol, o agua alcoholizada; ambos pueden medirse (en peso o en volumen), por separado antes de realizar la solución, con lo que tenemos resuelto el problema, ya que fácilmente podremos calcular la concentración, o la FM.

Cuando nos encontramos con una droga natural, por ejemplo de origen vegetal, comienzan las dificultades en la definición y medidas de soluto y solvente, y por consecuencia en la determinación de la concentración. Esto sucede, claro, porque no toda la droga que se pesa, pasa luego a formar parte de la TM, sino que una porción de ella es retirada, por no ser soluble en la preparación final.

El principal problema radica, entonces, en determinar cuál es el soluto, o lo que sería lo mismo: la concentración de qué queremos tener en cuenta?

La libertad de pensamiento que tenemos los seres humanos, motivó que se originaran distintas respuestas a esta pregunta, por lo que se adoptaron diferentes criterios para calcular la FM.

Considerando la importancia de estudiar los diversos puntos de vista, cuántos y cuáles son esos criterios y cuáles son, a nuestro modo de ver, sus ventajas y desventajas es que decidí comenzar este trabajo.

 

Top  Objetivo

El objetivo de este trabajo es investigar, desde los escritos de Hahnemann y las farmacopeas más antiguas que estuvieran a mi alcance, hasta las farmacopeas más modernas, los diversos criterios respecto a FM y UFM (Unidad de Fuerza Medicamentosa) en las TM de vegetales, dilucidar el criterio que usaron aquellos autores que no lo definieron expresamente, para luego analizando todas estas opciones podamos tomar un criterio propio.

 

Top  Metodologia de trabajo

Luego de la investigación bibliográfica se separó la información tratando en una primera parte los autores que no definen su criterio para calcular la FM y en una segunda parte las farmacopeas cuyos autores definen la UFM.

Luego con todos los datos en la mano se elaboraron las conclusiones.

 


(c) ACFaH 1998- Sabine Klein